23 de octubre de 2010

MI LIBERAL Y YO.




Hace tiempo, que pienso cómo escribir sobre ésto, me faltaban vivencias. Creo que ya,puedo hacerlo.
Un buen dia, conocí a alguien, llamemoslo J, sin pensar, por una casualidad, como suele pasar con los acontecimientos que de verdad, marcan una vida.
Me contó su vida, mejor dicho, la clase de vida que decía llevar. Estoy convencida que el destino me lo puso en mi camino, para que yo entendiera lo sucedido anteriormente en mi vida. Es como si algo que yo, tendría que haber vivido, no se realizó y me dieron otra nueva oportunidad.

Conoci a J por medio de un amigo, tenía mucha prisa en conocerme, y yo,mucha curiosidad. Eso es un rasgo caracteristico de mi forma de ser. El, me contó que amaba locamente a su esposa, pero que los dos, habían decidido hace un tiempo, vivir su sexualidad de otra forma que la habitual,en una pareja de casados. La compartian con otros y les iba muy bien. Bueno, tengo un imán especial para este tipo de situaciones. Decidi conocerle.
El, en cuanto me vió y hablamos tomando la cerveza convencional, noté como sus ojos, comenzaban a desearme. Hubo cierto momento de su charla, en que lo miré..y pensé..por que no? Me recordaba otro tiempo vivido, aunque la persona era totalmente distinta.
J, era dulce, seguro de sí mismo, encantador, hablaba despacio y era coherente, sus labios,me llamaban.
La misma historia, el mismo miedo dentro de mi, la misma situación. Pero distinto hombre, nada que ver, ningún parecido a no ser, por sus palabras. Pero ésta vez, yo estaba preparada.
Así él, organizó nuestro primer encuentro, porque al besarnos cuando nos despediamos, supe por sus besos, que sí pasaria, y que sería compartido y disfrutado.

El encuentro fué una tarde rojiza de noviembre, cuando aún el sol calentaba como si de una primavera se tratase. El aire tenia un aroma a tierra mojada, templada la tarde, nerviosos como adolescentes. El hotel era, me pareció ideal para tener ese primer encuentro con aquel hombre. Con decoración oriental,me vi transportada fuera del mundo cotidiano y eso ayudó mucho a desear aquella situación.

No se cansaba , no se cansa de besarme, eso, sigue siendo igual. No se cansa de abrazarme, cada dia, dice, me desea mas, y mas. Su deseo se hizo importante para mi, me curó muchas heridas.
El sabe como tratarme, me conoce. Conoce cada rincón de mi cuerpo y sabe como tratar mi alma.

Yo, me sigo haciendo un lio. Hablo con su mujer, es más, ella, me avisa si me ve por aqui, que me arregle pronto para no llegar tarde a la cita con su J. Para mí, y él lo sabe, todo es muy peculiar.
Le respeto su forma de vida, aunque no la entiendo, y quiero que él respete la mia. Es más, tampoco entiende por que sigo con él. Porque yo no soy liberal.

Despues de hacer el amor, hablamos a veces, me dice que despues de su mujer, estoy yo. Entonces..pregunto, pon nombre a ésto que hacemos... Dice, no es hacer el amor, porque no nos amamos, pero tampoco es sexo, porque te tengo mucho cariño.
Dios mio!!!, yo soy muy sencilla, no tengo tantos nombres para una sola cosa. Pero cierro los ojos, estoy bien en sus brazos, y eso es lo que me importa en ese momento.
La vida, al fin y al cabo, está hecha de momentos.
Cuando él, me desea, veo estrellas en sus ojos, veo como soy importante para él. Es su estado puro de la mezcla que hizo Dios, hombre-animal. Es, algo perfecto.
Lo transporto con mis besos al loco deseo de la unión de cuerpo y alma. Veo en su mirada como alcanza el extasis y eso me hace feliz. Mujer. Persona.

Para mí, es una persona importante, otros,lo verían degenerado en su comportamiento. Yo no juzgo, máxime, si no soy juzgada. Mi piel siente su cariño fuera del lecho y se convierte en algo que no extraño. Conquistada esa complicidad, respeto y ternura.

Le he preguntado muchas veces, si le gustaria compartirme como hace con su mujer. Respuesta: NO.
Porque lo que le doy, dice, no se lo dá nadie. Porque esos momentos, donde no hay un solo espacio entre nuestros cuerpos,se marchitarian, porque la presencia de otro hombre, le robaría mis besos, que sabe, solo son para él. Porque se diluiría la unión que se alcanza cuando se pierde la verguenza del desnudo y la intimidad de las miradas.

Me cuestiono a veces, qué clase de amor hay en su pareja. Para mí sería facilisimo tener esa vida, si no hubiese amor con la mia. Es más, pienso que es una situación ideal, para el cansancio y la monotonía. Ideal para no romper los intereses materiales que una pareja crea a lo largo de su vida Pero enseguida desvío mis pensamientos. No me corresponde saberlo. Solo sé lo que yo haría. Nada más.

Cuando yo he amado, no he querido que el aire roce la piel del hombre amado, no he querido que una sola lágrima resbale por su mejilla, no he querido que otra caricia, ronde su cuerpo. No he querido que otra mirada le haga sentir mariposas. Como así, he querido ser todo para él, superar lo insuperable, para ponerle el mundo entero a sus piés.

Claro..que yo soy tal vez, una de las pocas romanticas que quedan de ésta generación, que supo hacerse a sí misma, sin modelos y sin patrones.

El sentimiento de posesión, protección vá unido al amor. Es innato, no se puede cambiar. Si hay quien lo hace, yo, por más que lo he intentado, no he podido alcanzar ese estadío. Podría analizar aun mas, y lo haré cuando esté capacitada para ello, los sentimientos de éstas personas que viven su relación de esa forma. Me interesa llegar al alma de mis semejantes, es algo en lo que siento cuando lo hago, tal emoción, que es irresistible para mi.

No sé dónde hay más egoismo, si en sentir, y digo, sentir, que esa persona es la mujer, hombre de tus sueños, y no querer compartirla con nadie más, o en hacerlo para lograr alcanzar placer fisico.

Lo mejor de todo es, que yo me llevo buenos momentos, momentos grandiosos. Siempre es como la primera vez, y mejor aún. No lavo su ropa interior, no soporto el olor corporal cuando no es agradable, como en todo ser que está vivo, no soporto su mal humor,cuando lo tenga. Siempre soy deseada, buscada, admirada. Y tengo completa libertad.

Igual...la mujer liberal soy yo... :)